REGLAS BÁSICAS PARA INTENTAR SENTIRNOS BIEN CADA DÍA

1.Dejarnos unos momentos en silencio para nosotros mismos.
2.Programar, dentro de la rutina de cada día, alguna actividad que nos haga sentirnos bien.
3.Cerrar los ojos, respirar profundamente y escucharnos por dentro.
4.Sonreir, mirar con afecto a los que nos rodean, pues la mayoría se lo merecen, y al resto...bastante tienen con aguantarse ellos mismos.
5.Pensar en las cosas agradables que hemos hecho y las que nos quedan por hacer.
6.Hacer un poco de ejercicio que nos ayude a sintonizar con nuestro ritmo bilógico, con esa parte física que tanto repercute a nivel emocional.
7.Mirarnos al espejo con conplacencia,identificándonos con la imagen que nos devuelve y sabiendo que somos capaces de mejorarla.
8.Las dificultades las viviremos como un entrenamiento necesario que nos facilita la puesta en forma y nos ayuda a disfrutar de los momentos menos tensos.

EL ANHELO DE SER APRECIADO

El principio más profundo del carácter humano es el anhelo de sentirse importante, apreciado.Nada hay que más necesiten las personas que alimentar su propia autoestima.Sin embargo, alimentamos los cuerpos de nuestros hijos, amigos y empleados; pero, en muy contadas ocasiones alimentamos su autoestima, sin saber que una apreciación sincera puede cambiar la vida de una persona. La apreciación honesta logra resultados allí donde la crítica y el ridículo fallan.
Seamos calurosos y generosos con el elogio, herir a la gente no sólo no la cambia, sino que es una tarea que nadie nos agradecerá. Por el contrario, con muestras de aprecio, la gente acogerá nuestras palabras y las atesorará y las repetirá toda una vida.
Demostrar aprecio sincero y honrado es una regla básica para tratar con las demás personas, pruébalo.

SEGUIR CONFIANDO EN NOSOTROS MISMOS EN MOMENTOS DIFÍCILES

Es bastante fácil ser agradable
cuando la vida fluye como una canción,
pero el hombre valioso es aquél que sonríe
cuando todo sale mal,
porque la prueba de fuego para el corazón es
el conflicto,que inevitablemente vendrá con los años.
Y la sonrisa que merece todos los elogios del mundo
es la sonrisa que sigue brillando a través de las lágrimas.

ELLA WHEELEER WILCOX

Los momentos difíciles, aunque nos cueste comprenderlo, siempre encierran nuevas oportunidades, pero para poder verlas es necesario estar dispuestos a mirar,ver,oir,escuchar, así como intercambiar opiniones y dialogar.
Estos son unos consejos para salir de esa oscuridad:
*Intentar controlar nuestros pensamientos catastrofistas, distraernos con pensamientos positivos.
*Desechar aquellos pensamientos que nos indiquen que no hay salida.
*Emplear la observación como método para tomar distancia de la situación y recuperar la objetividad.
*Decirnos a nosotros mismos que somos capaces de salir de ese mal momento, mostrarnos seguros de nuestras posibilidades,creer en nuestro potencial.
*Mostrarnos seguros ante los demás.
*Nos animaremos por las nuevas opciones que se nos han presentado.
*Tener presente que después de difíciles momentos llegan enseñanzas muy útiles.
*Concedernos algún capricho, darnos tiempo a nosotros mismos para hacer aquellos que nos gusta, para tomar aire.

HAY QUE ENSEÑAR A NUESTROS HIJOS A NO SUFRIR INÚTILMENTE

La educación que recibimos desde pequeños por parte de los adultos tiende a sensibilizarnos hacia lo que nos puede perturbar, producir inquietud, inseguridad y desconfianza. Muchas inseguridades y fustraciones tienen su origen en esa enseñanzas que nos inculcan desde niños.
Parece que se nos olvida la importancia del refuerzo, del reconocimiento, de animar a las personas, y, por el contrario, cobra importancia el castigo, la humillación o la agresividad.
Estas son algunas enseñanzas que debemos potenciar para que nuestros hijos no sufran inúltilmente en sus vidas:
* Debemos fijarnos en lo positivo, no en lo negativo.
* Reforzar, en lugar de sancionar.
* Emplear la motivación, en vez del deber y el miedo.
* Dialogar, en lugar de imponer.
* Potenciar el razonamiento, no el seguidismo
* La alegría y la esperanza, en vez de la tristeza y la derrota.
* La seguridad, en lugar de la inseguridad.
* La autoestima, en vez de la humillación.
* La confianza, no la desconfianza
* La generosidad y no el egoismo.
* Potenciar el equilibrio, la madurez y el autocontrol, en vez de la tiranía o la manipulación, el desequilibrio o la insatisfacción permanente.